El avance del conocimiento en la medicina ha ido progresivamente generando una mayor especialización, y en particular en nuestra especialidad de la obstetricia y ginecología, en países desarrollados ya existen formalmente subespecialidades como la ginecología infanto-juvenil, oncología ginecológica, infertilidad, climaterio y medicina materno-fetal.
Desde inicios de los años 90, miembros de SOCHOG mencionaron la necesidad de crear una rama de MMF. Sin embargo, en ese momento, no había subespecialistas suficientes y esta era una rama que estaba recién iniciándose en países desarrollados. Actualmente, existe en el país un número de especialistas que ha recibido adecuada formación en el área de MMF, de modo que la posibilidad de la creación de esta rama ha resurgido como una gran necesidad.
El subespecialista de MMF debe ser un ginecólogo obstetra que ha completado al menos dos años de formación adicional en programas acreditados de MMF. Sus competencias específicas deben ser el diagnóstico y tratamiento de complicaciones del embarazo, sean estas condiciones pre-existentes o propias de la gestación. Sus habilidades deben permitirle efectuar procedimientos diagnósticos y terapéuticos en la madre y/ o el feto. Asimismo, sus conocimientos deben incluir aspectos obstétricos, médicos, genéticos y quirúrgicos de las complicaciones del embarazo. La relación entre el obstetra general y el subespecialista en MMF dependerá de la condición a tratar y de las circunstancias locales.
El año 1999 la Universidad de Chile inició la formalización de este proceso a través de un Diplomado en Medicina Fetal y Perinatal, el cual, al cabo de cuatro generaciones, derivó en la especialidad de medicina materno-fetal el año 2005. La Pontificia Universidad Católica de Chile formalizó la enseñanza de especialistas en MMF el año 2008, si bien hubo un programa informal de MMF desde los años 90. El año 2012 el programa de MMF de la Universidad de Chile fue acreditado por APICE por un periodo de tres años. El programa de MMF de la Pontificia Universidad Católica de Chile ha solicitado su acreditación, pero al momento de la redacción de este documento, se encuentra pendiente.
En el año 2013 CONACEM acogió la solicitud de SOCHOG para iniciar la certificación de especialistas de medicina materno-fetal, completando con ello este importante, pero a la vez, complejo proceso de mejoramiento de la calidad en medicina.
En este estado de situación del proceso de formalización de esta especialidad derivada de la obstetricia y ginecología, se conformó el año 2014 una Sociedad que se denominó “Sociedad Chilena de Medicina Materno-Fetal”, la cual, desafortunadamente, fue fundada por un grupo de colegas que en su mayoría no han realizado una formación universitaria ni fueron certificados por CONACEM.
Esta situación se complejizó frente a la solicitud de esta naciente Sociedad de tener un representante en el Comité de MMF de CONACEM con el objetivo de participar en el proceso de certificación de especialistas, al cual, la mayoría de sus miembros, no pertenecen. Este, que podríamos llamar “vacío legal”, en nuestra institucionalidad, derivó en una solicitud de CONACEM hacia la SOCHOG de definir la sociedad o rama científica que representará a esta especialidad ante CONACEM.
Se hace necesaria la generación de un espacio de discusión y desarrollo científico común, el cual, dadas las circunstancias antes mencionadas, solo la puede ocupar una Rama de la SOCHOG bajo el nombre de “Rama Científica de Medicina Materno-Fetal”. Esta Rama debe convertirse en una entidad a la cual converjan distintas visiones y posiciones sobre los diferentes aspectos de nuestra especialidad, desde los netamente científicos hasta los bioéticos. Esta Rama de MMF, debe ser un perfecto complemento de la actividad académica de las Universidades, y por ende, es necesario construirla con un estatus científico muy alto y prestigioso.
EL trabajo de creación de la Rama de Medicina Materno Fetal se inicia en diciembre de 2014 con la labor de un comité ejecutivo conformado por 10 expertos en MMF, los doctores: Jorge Carvajal Cabrera, Mauro Parra Cordero, Carlos Barrera Hermosilla, Gustavo Rencoret Palma, Juan Guillermo Rodriguez Aris, Juan Pedro Kusanovic Pivcevic, Gustavo Kiekebusch Hurel, Jorge Becker Valdivieso, Fernando Abarzúa Camus y Enrique Oyarzún Ebensperger.
Con los aportes de este comité, fue posible crear la idea general de la conformación de la rama, estableciendo su misión y propósitos. De ésta forma, durante el mes de octubre del 2015 se envió una invitación a todos los médicos cuya especialidad en MMF estaba reconocida por CONACEM, para integrarse a la Rama de MMF de SOCHOG.
La respuesta fue afirmativa generando en este momento una membresía de 46 médicos. En diciembre del 2015, los socios de la rama propusieron nombres para integrar el directorio el que fue ratificado en votación de abril de 2016 por un 73% de los socios y quedando conformado por los doctores Jorge Becker Valdivieso, Jorge Carvajal Cabrera, Juan Pedro Kusanovic Picevic, Fernando Abarzúa Camus y Gustavo Rencoret Palma. El directorio eligió como presidente de la Rama de MMF al Dr Jorge Andrés Carvajal Cabrera, y designó como encargado de Educación Continua al Dr Carlos Barrera Hermosilla.